¿Sabías que el entorno que nos rodea puede disminuir el estrés y potenciar la creatividad, nuestra inteligencia, incluso aumentar la esperanza de vida? Hoy tenemos la participación de una de nuestras empresarias visibles, María Gil, arquitecta, diseñadora de interiores y especialista en neuroarquitectura, quien nos cuenta más sobre qué es el diseño biofílico y sobre su efecto sanador y reparador en las personas llegando a aumentar nuestra calidad de vida y bienestar.
Imagina un viaje en la naturaleza
María nos invita a seguir leyendo imaginándonos que estamos sumergidas en el corazón de un bosque. Puede ser la Selva de Irati o, el mismo parque que se encuentra al lado de tu casa. ¿A qué simplemente con solo imaginarlo te sientes más relajada? Y lo mejor de todo es que la distancia es lo de menos, lo que importa es la experiencia que estás sintiendo.
Lo importante es que has aceptado poner todos tus sentidos al servicio de un experimento sensorial en busca de emociones intensas, conectando con la naturaleza donde tu único compañero es el silencio.
Sientes pasos aderezados por el crepitar de un mar de hojas perennes rojizas caídas de los árboles, partituras musicales compuestas por innumerables aves comienzan a deslizarse por tus oídos, árboles que se abrazan entre sí. La brisa provocada por el ecosistema te envuelve. Percibes diferentes intensidades de luz que penetran a través del follaje de las copas y sientes cómo te cargan de energía…
Esto amiga, es el poder del diseño biofílico que nos recarga de positivismo, tranquilidad y calma.
Qué es el diseño biofílico
Ante la pregunta de qué es un diseño biofílico. Según María Gil es un concepto que constata los grandes beneficios del entorno natural en las personas, que es justo lo que estás emulando en estos momentos imaginándote estar leyendo este artículo sumergida en el corazón de un bosque.
María Gil es una profesional del diseño que cree fielmente en el gran poder reparador que tiene un bosque y la naturaleza en general. Los paseos en su seno adquieren toda una capacidad sanadora. Ella lo califica como “la medicina más natural que existe”.
Las personas somos seres sensoriales. Por este motivo, la naturaleza y el entorno arquitectónico que nos rodea afectan directamente a la tasa de felicidad. Los beneficios del diseño biofílico se pueden resumir en que este tipo de diseño influye de manera directa a la experiencia humana, a nuestra conducta, a nuestras emociones, a todo nuestro ser. El diseño biofílico aumenta el bienestar y la calidad de vida, haciendo que las personas se sientan mejor y conecten consigo mismas.
La conexión con la naturaleza está incorporada en nuestro ADN desde hace miles de años.
Tanto es así, que millones de japoneses afectados por varios de los grandes males de nuestro tiempo, el estrés, depresión y la ansiedad, acuden a sesiones de Terapia del Bosque, una terapia que consiste en conectar con espacios naturales.
Hay estudios que indican que el conectar con la naturaleza consigue que los ciudadanos se sienten con:
- Un aumento del 15% en la variabilidad del ritmo cardíaco
- Una reducción del 41% en la ansiedad
- Y un aumento del 39% en la conexión social tras sólo un par de horas paseando por el bosque.
Y no es de sorprender, teniendo en cuenta que las plantas se comunican biológicamente de manera directa con nuestro sistema inmunitario y con el inconsciente.eGracias a una conexión invisible: sonidos, gustos y sensaciones producidas, pero de la que sin duda se sienten sus efectos positivos como sensación de amplitud y libertad, entre otros.
Crear espacios sanadores
En este sentido, María Gil nos revela que la neuroarquitectura nos ha ayudado a comprender cómo el hábitat en el que vivimos influye en nuestra salud.
Por este motivo, debemos incorporar la naturaleza a nuestros espacios mediante el Diseño Biofílico. En referencia a esta corriente del diseño, existe una investigación pionera publicada en la Revista Science. En ella se demostró que los pacientes enfermos que se sitúaban junto a ventanales con vistas a elementos naturales, como montañas, agua o un simple bosque, en un hospital, se recuperaban un 20% antes y necesitaban menos analgésicos que pacientes en la misma habitación, pero sin vistas. Algo muy revelador y fácil de conseguir.
De esta manera, un espacio seguro para nuestra biología humana es aquel que nos recuerda a la naturaleza. Aunque de forma incongruente cada vez talamos más árboles y vivimos más alejados de ella, la cual es vista lamentablemente como ese lugar de vacaciones donde por fin podemos recuperarnos y recargar pilas. Como por ejemplo, el hecho de ir al famoso pueblo de nuestros abuelos, nos aporta desconexión y paz.
En la misma línea del estudio anterior, una investigación publicada en la revista The Lancet Planetary Health, demostró que el aumento del 2% de la vegetación a 500 metros de la vivienda de cada persona, reduce un 4% su riesgo a morir prematuramente.
En realidad, todos podemos incorporar la naturaleza a nuestros espacios de forma fácil, rápida y económica. Esto es lo que el diseño o arquitectura biofílica propone, la implementación de características naturales no solo de forma real sino también simulada en nuestros hogares, en nuestro entorno de trabajo y, en todos y cada uno de los espacios que habitamos en nuestra sociedad. Estudios demuestran que puede aumentar la productividad tanto a nivel personal como profesional.
El cerebro no distingue la realidad de la ficción
En el año 1998 un descubrimiento científico demostró que lo natural y lo simulado logran el mismo efecto. Es decir, nuestro cerebro no distingue realidad de ficción.
Sus conclusiones fueron que, los pósters o cuadros con vistas de paisajes colocados en lugares de trabajo, que evocan elementos naturales, crean un efecto terapéutico similar al de una ventana con vistas a un paisaje. El uso de materiales naturales tienen el mismo efecto con materiales ficticios o simulados a nivel psicológico. Para María Gil, este estudio, junto con el de nuestra necesidad de contacto con la naturaleza, son dos de los descubrimientos teóricos-científicos más importantes de la neuroarquitectura.
En otras palabras, la idea es favorecer el impacto de la naturaleza de todas las maneras posibles. Aprender a beneficiarse de sus efectos incluso de forma simulada, sin incluir plantas naturales.
Este acto está a la altura de todos y un dato importante es que tiene mayor eficiencia energética. Podemos implementar en nuestros diseños la naturaleza de forma simulada. Eso sí, por supuesto, cuanto más calidad y cantidad de biodiversidad genera una arquitectura orientada y cuantos más sentidos estén implicados, más beneficioso será.
Incorporación de elementos naturales en el espacio
Realizando un ejercicio de sinceridad, la cultura y los espacios que habitamos no respetan nuestra biología en muchos de los casos. Sin darnos cuenta, nuestra casa puede convertirse en nuestra cárcel en vez de nuestro refugio. Un arma de doble filo. Por ese motivo, aclara María, debemos cuidar nuestros entornos físicos para sentirnos seguros y poder conectarnos con otras personas. Somos seres sensoriales y de la conexión.
Al hilo de lo anterior,. El Neurodiseño no es una cuestión económica o de un poder adquisitivo en concreto, sino que se erige como una democratización del acceso de la naturaleza al interior de todos y cada uno de los hogares de nuestra sociedad. De esta manera, esto debería ser un deber social y necesario, por lo que podemos valernos de una serie de herramientas del diseño que están al alcance de todos:
Herramientas para impulsar el nerurodiseño
- La luz natural regula nuestro reloj biológico interno. Por ello la luz artificial debería simularla. En este sentido, al encender las luces en nuestras viviendas al atardecer, éstas deberían mantener una tonalidad cálida, y optando por varios puntos de iluminación de baja intensidad, en lugar de uno muy intenso.
- No solo utilizar materiales ecológicos sino naturales como la madera, piedra, algodón, linos o piel, en detrimento de plásticos, poliéster o metálicos
- Formas naturales: Evitar los ángulos agudos que son interpretados como una agresión para nuestro sistema nervioso. Utilizar formas, curvas, sinuosas y modelos biomórficos, llamados patrones del diseño biofílico.
- Las plantas purifican el aire y nos relajan. Pero ya sabéis que podéis simularlas, a través de plantas preservadas o artificiales, ilustraciones de naturaleza en láminas, fotos, o estampados en textiles, e incluso vídeos de naturaleza.
- El medio más económico para introducir la naturaleza visualmente es pintar paredes y techos con tonos tierras, azules cielo, verdes vegetación, blancos neutros…
- La aromaterapia puede serenarnos o contribuir a un sueño más reparador, gracias a difusores de aceites esenciales naturales, lavanda para la relajación y romero para la concentración.
- Disminuir o eliminar los sonidos de bajas y altas frecuencias Por ejemplo, los aires acondicionados, las situaciones de tráficos, el sonido de los ascensores, etc. Provocan un estado fisiológico de movilización en el sistema nervioso, que pone en alerta de forma inconsciente.
En conclusión, debemos poner atención en lo que el espacio físico nos hace sentir. Ahora que ya sabes qué es el diseño biofílico y cómo influye en nuestro estado emocional de la misma manera, nuestro estado emocional influye en cómo lo decoremos o diseñemos.
María Gil nos ha compartido una serie de tips y recursos para poder aplicarlos al diseño de nuestros hogares y que puedes aplicar desde ya. Si quieres ir un paso más allá y aprender mucho más sobre esta modalidad del diseño, María Gil tiene un Curso Avanzado de Neuroarquitectura donde te cuenta en profundidad sobre esta disciplina y muchas otras en su Academia Española de Neurociencias aplicada a la Arquitectura y el diseño, de la cual es fundadora. Así que te animamos a visitar su web y a consultar en detalle todo sobre esta formación avanzada. Aquí os dejamos su web
Sobre Empresarias Visibles
Empresarias Visibles es una revista de mujeres emprendedoras y empresarias comprometidas en hacer sus negocios visibles en Internet. Más de 50 emprendedoras y empresarias, como María Gil, neuroarquitecta y fundadora de la Academia Española de Neuroarquitectura, ya forman parte de nuestra revista. Descubre a María y otras mujeres increíbles en nuestra web Empresariasvisibles.com.